martes, 1 de abril de 2014

EL ALCALDE DE LA GARRIGA, CONVERTIDO EN EL HAZMEREIR DE LOS LECTORES DE " LA VANGUARDIA"- ( JULIO - AGOSTO 1884)


Los lectores y seguidores de este blog, recordarán que el pasado lunes, 24 de marzo, colgué el post " CUANDO EN LA GARRIGA CUALQUIERA SERVÍA PARA ALCALDE, EN TIEMPOS CONSERVADORES, SEGÚN LA PRENSA DE LA ÉPOCA (AÑO 1884). Vean el link  

http://jvendrellcampmany.blogspot.com.es/2014/03/cuando-en-la-garriga-cualquiera-servia.html

  
Y consultando, consultando la hemeroteca del diario barcelonés "La Vanguardia",  he encontrado nuevas publicaciones referidas a aquella rocambolesca situación que ciertamente, me ha dejado anonodado, es decir,  muy desconcertado, e intuyo que los lectores de aquel periódico, debieron de reir hasta la saciedad cuando, en ediciones posteriores, y referidos a aquel acontecimiento, seguían apareciendo cartas y sueltos relacionados con la actitud del alcalde del municipio. Así, el Corresponsal del periódico en  La Garriga, escribía en la sección de  Cartas al Director explicitando que "Como epílogo á las noticias que le comuniqué la semana anterior, respecto á las encontradas resoluciones de nuestro queridísimo y nunca bien ponderado alcalde de pan y huevo, debo manifestarle que esta autoridad, arrepentida de tan solemne traspié, ha convocado esta mañana á los concejales para acordar el programa de las fiestas que deben celebrarse en este pueblo los días 3, 4 y 5 del próximo agosto, las cuales, si mis informes no son equivocados, se reducirán á solemnes oficios, procesión, escogido concierto y bailes en un entoldado que se levantará en la parte exterior del ala izquierda de la iglesia, contratándose á la "Orquesta Sancho" y al atrecista señor Viñals de esta capital. El alcalde descarriado ha vuelto a su redil y como al hijo pródigo debemos perdonarle su salida de pié de banco, cuando en primer momento y en un instante de autoritaria arbitrariedad, prohibió por temor (?) al contagio epidémico, la celebración de bailes."

Más adelante continuaba  aquel Corresponsal:

" En lo concerniente á cólera nada se teme en esta población, pues no hay recuerdo de que en épocas de epidemia haya tenido que lamantarse un solo caso."

...y finalizando su larga carta de este modo:

" "En todas partes cuecen habas y en mi casa á calderadas" pues el conocido farmecéutico don J. Plandiura vende fresas anticoléricas que son muy celebradas por los muchos forasteros que las compran y mandan, como exquisito regalo, á esa capital" (1)

Después de las tres publicaciones de fechas anteriores,  y  vistos los términos en que estaban escritos,  subidos de temperatura, es de suponer que calaron en lo más hondo del  nerviosismo de la primera autoridad civil de La Garriga, que a través del Secretario del Consistorio  hizo llegar una carta a "La Vanguardia", que no se publicó pero  mereció el siguiente suelto:

" Al secretario del Ayuntamiento de La Garriga que nos ha remitido una carta para que sea publicada en LA VANGUARDIA, hemos de decirle que necesitamos se tome la molestia de pasar por esta redacción á fin de llenar ciertos requisitos que son indispensables para satisfacer sus deseos" (2)

Pero la cosa no terminaría aqui. La rabieta del alcalde debió acentuarse de tal manera que,  una semana más tarde aparecía, en el mismo rotativo,  otro suelo en estos términos:

" Hemos de contestar á la carta que nos ha remitido el alcalde de La Garriga, que mientras no use en ella el estilo cortés que le impone el cargo que ejerce, no daremos á luz su desatenta elucubración.
Si el alcalde de La Garriga se cree que trata con los baturros de su comarca, le haremos entender que se ha equivocado completamente. " (3)

Ignoro el significado que tenía,-- aunque lo supongo --  para  "La Vanguardia", cuando se refería a "los baturros de la comarca" a la que pertenece el municipio de La Garriga. Considero que después de este cruce de noticias y de cartas, debieron de acabar todos perdiendo " los papeles", como vulgarmente suele decirse. Entre todos, se había llegado demasiado lejos.



(1) "La Vanguardia", miércoles, 30 de julio de 1884, pág. 9 
(2) "La Vanguardia", lunes, 4 de agosto de 1884, pág. 3
(3) "La Vanguardia", domingo, 10 de agosto de 1884, pág. 5