Banderín del municipio de San Baudilio de Llobregat, del año 1960.
Hubo en tiempo, entre los últimos años de la década de los 50 y primeros de los 60 del siglo pasado, que se caracterizó, entre otros muchos aspectos, por la confección de banderines que algunos establecimientos de los municipios y ciudades ofrecían a la venta a los visitantes, como "souvenir" o recuerdo de su estancia o paso por aquella localidad.
Esta costumbre arraigó de inmediato, y no tardó en convertirse en objeto de regalo a las personas amigas o más próximas del entorno familiar, al regreso de una excursión o estancia en determinados lugares de la geografía hispana, al tiempo que pasaría a ser una nueva aportación al coleccionismo especializado.
Recuerdo perfectamente que, por aquella época, acostumbraba a comprar un banderín de los lugares que visitaba, llegando a decorar un amplio tramo de pared de mi habitación con estos banderines, que agrupaba por provincias, a nivel de Catalunya.
Con el paso del tiempo, como suele ocurrir en tantas otras cosas, aquella tendencia o costumbre fue cayendo en desuso, y de los numerosos banderines que llegué a conseguir a lo largo de aquellos años sólo conservo, en estos momentos, el que ilustra estas líneas y el que colgué en el post de fecha 25 de julio pasado, referido al XXIII aplec a la ermita de Sant Ramón Nonat, del año 1959, pero de todos modos suficientes para recordar, con nostalgia, aquella parcela de los felices años de mi lejana adolescencia.